sábado, 10 de julio de 2021

SOBRE EDUCACIÓN

la problématica sobre la educación nos lleva a grandes confusiones. Por un lado nos salen tipos tan retorcidos como el derechista Cesar Vidal que lo único que tiene es labia para confundir a todo el mundo y decir cien mil estupideces por minuto; según este facistoide es un crimen enseñar en las escuelas sexualidad a criaturas de seis u ocho años ¡Pobres! Por otro lado, cada vez se oye más eso de que la educación debe comenzar desde casa, ambas teorías son completamente absurdas, las vamos a analizar en este corto ensayo. Hace muy pocos días, en la Coruña, en un acto al parecer homofóbico, fue asesinado a golpes un joven de 24 años (foto), no es un acto aislado, no es el único joven asesinado en un acto homofóbico, al margen de agresiones físicas, insultos y discriminación. Qué decir por otro lado de los transexuales, los que muchos han recibido tantas agresiones que han llegado al suicidio. ¿Cómo evitar esta barbarie? ¿Cómo conseguir una sociedad donde se respeten todos los derechos e ideas de los demás? No hay duda que se necesita una educación, sin que esto garantice al cien por cien acabar con la discriminación, pues siempre puede salir un descerebrado que no entienda lo que es la convivencia y el derecho de todos a vivir tranquilos con su forma de ser y a los que hay que respetar. Para el facistoide de Vidal, lo mismo que fue para Franco,no hay que hablar de sexualidad a los niños en la escuela, para muchos, y ha habido grandes protestas, son los padres los que deben en lo general, educar a los hijos. A nada que se piense un poco, uno se puede dar cuenta de la gran estupidez e ignorancia que lleva esta afirmación. Mencionemos por ser actualidad y como ejemplo este reciente hecho de Coruña. Los asesinos del joven Samuel (es su nombre) son jóvenes también, imaginemos que tienen hijos o los tendrán ¿Qué van a enseñar a sus hijos: ¿qué hay que matar maricones, que todos los que no son heterosexuales son anormales y hay que agredirlos? Es lo único que estas bestias inhumanas pueden enseñar a sus hijos, a ser como ellos, machines como sus padres para acabar con estos seres inferiores. En contra de lo que señala el facistoide Vidal, quien se presenta como seguidor de Cristo y es lo más anticristiano que hay, es en las escuelas donde a los niños hay que enseñarles sexualidad y enseñarles a respetar todas las formas de ser. Lo mismo sucede con la educación en general, esta debe comenzar desde casa, pregonan los puritanos y cortos de mente. Imaginamos unos padres analfabetos, borrachos, desobligados, golpeadores... y los tontos diciendo que tienen que educar a los hijos, pues dónde tienen la cabeza, si es que tienen y hay que tener e cuenta que hay muchas personas así, con un ejemplo tendremos bastante, creo yo. Donde vivía en México, eran cinco pisos de cuatro departamentos cada uno. Yo vivía en el primero, debajo mio, planta baja, vivía un matrimonio con dos hijas, hoy grandes amigos mios. el matrimonio era maestros, la mujer sigue siendo, el hombre está jubilado. Resultado: La hija mayor dos carreras, maestra y nutriologa, la pequeña se prepara para estudiar medicina. En el quinto piso un matrimonio con cuatro hijos, el padre un día si y otro también, llegaba borracho, los escándalos con golpes a la mujer y hasta amenaza con cuchillo eran normales, ella se fue de casa teniendo otro hijo con otro, para luego volver con el marido. En este ambiénte fueron creciendo los hijos, ninguno tiene estudios, una hija vio en el matrimonio la forma de independizarse y el hijo mayor trabaja en lo que puede para ganarse unos pesos y mal vivir. Sí, que la educación comience desde casa es bueno, sin duda, pero no siempre es posible y para eso están las escuelas, para dar etudios a todos los niños sin importar la condición de sus padres. Son las escuelas las que deben educar a los niños y tratar de hacer de ellos gente de bien. Para terminar decir que en varios lugares de España han habido grandes manifestaciones en protesta por el asesinato de Samuel y contra la homofobia, me hubiese gustado participar en alguna; pero la lejanía me lo impidió, Algo positivo, la cantidad de personas que estamos contra estos delitos de odio. Samuel era un buen muchacho, se dedicaba a cuidar ancianos en una residencia, los cuales le tenían un gran aprecio. Samuel no mereció morir. Vaya desde estas páginas mi más sentido pésame a la familia y mi repudio a los criminales.

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