domingo, 25 de noviembre de 2012

MALDITO PERDÓN

En la cárcel luché contra todos por enseñarles que soy vasco. Al que me llamaba español no le contestaba. Para enojarme y en plan de bromas, algunos me gritaban español. Mi respuesta era contundente ¡Chinga a tu madre¡ Enseñé que los vascos somos vascos, muchos me pedían explicaciones y se las daba y así, fui El Vasco de Chiconautla.
me avergüenza e indigna que me llamen español, mi orgullo, inmenso orgullo, es el ser vasco y como tal, haber militado en ETA, nuestro glorioso ejército de liberación nacional. Antes de militar en ETA, vi cómo los españoles masacraban a nuestro pueblo, cómo torturaban y asesinaban a nuestros hermanos, a nuestros patriotas. En estos bestiales crímenes perdí a mi queridísimo amigo Santos Blanco, un auténtico hermano.
Son muchos, en nuestra moderna historia, entre nuestros soldados y entre gente del pueblo, que han sido asesinados por las tropas invasoras españolas, son cerca o más de 300, a esto hay que añadir los miles de torturados por el simple hecho de ser vascos y que decir de los miles de exiliados que hemos tenido que dejar nuestra amada patria mientras que la bota extranjera sigue mancillando nuestro suelo; pero aparte, a nuestro pueblo, el pertenecer a esa España que no queremos y a lo largo de nuestra historia, le ha costado otros miles de muertos, cómo olvidar Guernica, donde mujeres, niños y ancianos fueron masacrados sin piedad. Sé que sucedió esto último hace muchos años y bajo otras circunstancias, sin embargo, es parte de nuestra historia y no deja de ser por lo mismo de pertenecer por la fuerza a esa España de la que tan sólo queremos separarnos para formar una nación libre y soberana como nos pertenece.
Ahora, lleno de indignación, veo como nacionalistas, hermanos, hablan de la deshonrosa actitud de pedir perdón al invasor, a los familiares de los ejecutados por nuestros patriotas.
¿Cómo es posible tal actitud? ¿Para eso dieron sus generosas vidas nuestros patriotas? La muerte de mi amigo Santos no la pagan ni con la vida de cien millones de asesinos como quien lo mató y lo mismo sucede con la de tantos y tantos hermanos asesinados por las fuerzas invasoras españolas.
Veo en El País, a llamados abertzales, guardar silencio en el aniversario de la muerte de unos txakurras españoles disfrazados de vascos. ¿Es que acaso esos malditos que usan txapela en la paz y se ponen sus cascos para reprimir a nuestro pueblo, no han destruido a nuestros comandos, no han encarcelado a nuestros hermanos, no han llegado a asesinar a nuestros patriotas?
Un día una persona me preguntaba en México si había ganado algo con eso. Viendo la heroica lucha que mi pueblo llevaba por su libertad, cómo luchaba cuando asesinaban a un patriota haciendo una impresionante huelga general y participando en mil batallas contra las fuerzas invasoras españolas, respondí lleno de orgullo que por un pueblo así merece la pena luchar, merece la pena morir. Más hoy, ante una total bajeza, no sé si sentir orgullo o vergúenza de ser vasco, bueno, la vergúenza nunca la sentiré, pues sé que todavía nos queda mucha gente por la que merece la pena luchar y que son dignos representantes de nuestro  noble y buen pueblo y además y lo principal, tenemos a nuestra Euskal Herria, Pero esto del perdón no tiene nombre, si alguien debe pedir perdón son ellos a nosotros, sin embargo ese perdón no lo necesitamos, pues nuestros patriotas no dieron sus vidas para que les pidan perdón, la dieron por conseguir una patria libre y justa.
Mantegamos la dignidad por encima de todo, pues ésta es nuestra razón, la razón de un pueblo que lucha por su justa libertad, sus muertos, ellos se lo buscaron por invadir un país que no es suyo o por colaborar con esas fuerzas invasoras de uno u otro modo, a los nuestros, nosotros les lloraremos o mejor todavía, los pondremos donde se merecen, en los altares de la patria y serán nuestro orgullo y el orgullo de futuras generaciones cuando semos libres.
Señores de la izquierda vasca, señores que un día lucharon al parecer para verse bien ante el pueblo y que por lo que se ve la propaganda fascista del invasor les ha vuelto idiotas y les ha lavado el cerebro, dejen de arrastrar la dignidad de nuestro pueblo por los suelos y ponganse a luchar para que un dia seamos libre y entonces sí, haya una paz auténtica con los españoles y con todo el mundo.


sábado, 3 de noviembre de 2012

 Como todos saben, he permanecido un año y cinco meses en prisión. Todo comenzógfgr tel viernes 20 de mayo del 2011. E ran poco menos que las cinco trhyheinta de la madrtugada  cuando me disponía a hv abrir la puerta de la jaula en  donde guardaba el taxi que trabajaba, cuando 4 individuos pistola en mano y de civil, me salieron de un carro ordenándome que levantara las manos y haciendo que me tirara al suelo boca abajo.
Tras la primera sorpresa y al no identificarsvvg e en ningún momento como policías, pense que eran personal de la señora Wallace y que me iban a llevar a algún lugar para matarme. Me puse a gritar que me mataran de una vez, que me diesen un tiro en la cabeza, a la vez que les mentaba la madre.
Al fin me subieron a un furgón de la AFI, lo cual ya me htranquilizó, pues nada tenía que temer ya que nada había hecho, nada delictivo.
Estube en el furgón como dos horas, pues llegó el ministerio público y entró en mi departamento estando yo esposado en el furgón. Grande fue la sorpresa cuando me acusaron de tener un arma de uso exclusivo del ejército, una R-15. Me quisieron hacer firmar una declaración en donde aceptaba que el cateo se hizo con mi autorización y que el arma me la había dado ETA para vender, pues a eso me dedicaba.
Todo fue una gran farsa y queda la duda, de si el castigo fue por mandato del gobierno español, lo que sería indignante para México, o si todo se debe a la señora Wallas. Para comprender bien este caso, es coveniente revisen la página: carceldemujeres2.wordpress.com blog que vino a sustituir al que yo venía haciendo de carceldemujeres.... Y es que no se tesperaban que otro iba a ocup.  ar mi lugar, superando incluso lo que yo hacía.
Deseo aclarar que bien es cierto que milité en ETA y siempre he sentido un gran orgullo de haberlo hecho, pues como bien enseña la historia, quien lucharr  por la libertad de su patria no es un terrorista, sino un libertador. Sin embargo, es evidente que en los más de 30 años que llevo en México, no soy de ETA y lo único que tengo de etarra es la inmensa simpatia que siento por mis hermanos y por la gloriosa organización.
Quiero dejar claro que yo no puedo vender armas en Mexico, pues no deseo que el país que me dio la libertad se esten matando entre ellos, yo por lo menos no voy a colaborar en ello. Estoy contra la droga por que la droga destruye a los pueblos, por lo que tampoco me podría dedicar a ese negocio y lo digo por si un día pretenden hacerme otra fechoría. Igualmente aclaro que jamás violaría a una mujer, me parece absurdo además de mentes enfermas, ni tampoco me dedicaría a atracar autobuses de pasajeros o a ciudadanos que van caminando por las calles. En suma, soy revolucionario y como tal me alejo de cometer delitos contra el país que me dio la libertad y me aceptó como su ciudadano, creo que siempre me he portado a la altura para demostrar que el gobierno español miente y que no somos delincuentes como pretenden hacer creer a la opinión pública, que somos honrados trabajadores que vivimos de nuestro trabajo y al igual que yo es lo que han demostrado los demás compañeros exiliados.
Ahora bien, fuí conociendo las cárceles de mujeres y vi las tremendas injusticias que se hacían contra muchas de ellas, las que siendo inocentes se las condenaba a treinta y cuarenta años de prisión, separándolas de sus hijos y dejando a estos en la orfandad. Un gran exito para mi fue la libertad de una muchacha sentenciada a más de 30 años de prisión por el supuesto asesinato de su esposo. La entrevisté y vi que era inocente, traje su historia a mi blog pidiendo se le haría justicia, unos abogados vieron el caso, la defendieron y la sacaron libre cuando apenas llevaba tres años y pico.
Así conocí a Juana Hilda Gozalez, acusada del secuestro y asesinato del hijo de la señora Wallace. Tras una entrevista con ella me quedó más que claro que tanto ella como el resto de los acusados eran inocentes y una exaustiva investigación me fue convenciendo más y más de mi afirmación. Más de 30 artículos saqué en mi blog, estaba claro que esto iba a molestar a la señora Wallace, amiga del presidente de la república y de los más altos mandos del gobierno.
Quien vea el blog mencionado se dará cuenta de lo que estoy señalando.
Mis armas hoy en día son las letras y no quiero más y se supone que el escribir es libre, el presidente lo ha dicho más de una vez: "Nadie puede ser molestado por lo que escribe, el escribir es libre y cada quien tiene derecho a escribir lo que crea conveniente" (palabra más palabra menos) pues sí, por escribir no te encarcelan como tal delito, pero te siembran otro y vas a la cárcel si escribes algo que al poderoso no le gusta y esto no es democracia, la democracia que tanto les gusta mencionar y de la que tanto cacarean, esto es fascismo y es curioso ver el gran cinismo de los poderosos cuanto dodavía hablan de una policía con ética y al servicio del pueblo, no sé al servicio de qué pueblo sea, sera al de ellos, pero quien encarcela inocentes jamás estará al servicio del pueblo.
Aclaro que ETA y el caso Wallace son dos cosas totalmente distintas que nada tiene que ver una con otra. Fui militante de ETA en mi país hace 30 años y el caso Wallace es algo personal, que como escritor di con él y seguí su secuencia, lo hago ya como un mexicano cualquiera que tiene derecho a hacer el trabajo que le guste o crea necesario, estoy empleando el derecho a escribir libremente y cuando la señora mencionada quiera, con todo gusto damos una prueba de democracia y tenemos un debate para demostrarle que esas personas son inocentes.
Que no me meta en broncas, me han dicho, pero como callar las injusticias que veo contra gente indefensa, creo que el deber de todo revolucionario es luchar por las causas aunque sean pequeñas para poder hacerlo también por las grandes.
Estos son los motivos reales de mi encarcelamiento que me llavaron a vivir un infierno, sin embargo, ha sido una gran experiencia de la que sin duda sacaré grandes cosas.
En Chiconautla fui el Vasco y así me llamaban todos, cuando alguien me quería hacer enojar me llamaba "Español" y de punta a punta le respondía:
-¡Chinga a tu madre! -Lo que causaba la risa de medio dormitorio que escuchaban lo sucedido. Espero que se siga     mi ejemplo y los vascos gritemos al mundo que somos vascos y no españoles y que cuando veamos una injusticia cmo la cometida en el caso Wallace, actuemos como gente rv tt r t. Vc tde bien, como gente que ama la justicia y detesta lo injusto.
A pesar del castigo de la cárcel, todavía sigo sin poder ir a mi departamento por permaneces asegurado y sin poder recojer las cosas que se llevaron, incluyendo la computadora, de donde de inmediato borraron el blog de cárceldemujeres.
Quiero agradecer la ayuda brindada por gente de mi país de origen, sin la cual no hubiese podido sobrevivir o lo hubiese hecho en circunstancias deporables, como dormir en el suelo, fregar éstos y comer basura. Esta ayuda es la que te hace resistir y darte cuenta que tu lucha no ha sido en vano, que vale más el aprecio de un amigo, de un hermano, que el odio de un millón de imbéciles engañados por la prensa y por la propia ignorancia.
A todos vosotros y también a los muchos mexicanos que estuvieron de mi lado, incluidos presos, un abrazo muy fuerte y mi eterna gratitud